17 de mayo de 2012

Miedo al sexo después del infarto


Miedo al sexo después del infarto
Menos del 1 por ciento de los supervivientes a un ataque al corazón fallecen a causa de un encuentro sexual. © Yuri Arcurs
Las personas que eran sexualmente activas antes de sufrir un ataque al corazón tiene más probabilidades de recuperar su vida sexual si han recibido orientación sobre el tema antes de salir del hospital.

Después de un infarto, la mayoría de las personas tienden a disminuir su actividad sexual, tanto mujeres como varones. En la mayoría de los casos, el miedo a «forzar» es el responsable. Este temor se produce por falta de información. Según un nuevo estudio que se publica en The American Journal of Cardiology, la mayoría de ellos dijeron que no habían recibido consejo médico alguno antes del alta hospitalaria.

El equipo de Stacy Tessler Lindau, de la Universidad de Medicina Chicago (EE.UU.) ,analizó a 1.879 pacientes que había sufrido un ataque cardiaco y la mayoría reconoció que no había recibido información sobre este tema antes del alta. Al año, hombres y mujeres. recuerdan las instrucciones que sólo el 41 por ciento de los hombres y el 24 por ciento de las mujeres recocieron haber tenido una conversación con su médico sobre sexo.

Para Lindau, el estudio subraya la importancia de abordar este tema con los pacientes para que recuperen su vida. «Los médicos necesitamos entender la importancia que tiene una buena información para evitar el miedo y la preocupación sobre el riesgo de recaída o incluso la muerte con el regreso a la actividad sexual »,
Miedo infundado
Sin orientación, los pacientes toman sus propias decisiones, a menudo erróneas, sobre el supuesto riesgo asociado con la actividad sexual. Son muchos los estudios que han demostrado que el sexo no es peligroso para el corazón. En realidad, sólo alrededor del 1 por ciento de los ataques cardiacos ocurren durante el acto sexual y menos del 1 por ciento de los supervivientes a un ataque al corazón fallecen a causa de un encuentro sexual.

Las directrices actuales establecen que los pacientes estables sin complicaciones del corazón puede reanudar su actividad sexual a la semana o 10 días. En enero, la Asociación Americana del Corazón (AHA), publicó un informe en el que se indicaba que si los «pacientes pueden hacer en ejercicio moderado, por lo general están lo suficientemente sanos como para mantener relaciones sexuales ».

«El objetivo es restaurar la salud del paciente», señala John Spertus, de la Universidad de Missouri en Kansas City; es decir, «minimizar la progresión de la enfermedad coronaria, y maximizar la calidad de vida».