29 de enero de 2011

Nunca se es demasiado joven para empezar…

cerdito
Un señor británico nos da una lección sobre las pensiones que conviene que todos aprendamos, no importa la edad.
En estas páginas varios de nosotros hemos hablado muchas veces de la necesidad de que cada uno de nosotros tome la responsabilidad sobre nuestro futuro retiro. Es decir, en vez de cerrar los ojos y esperar que el gobierno nos pague lo que nos promete en el momento de nuestro retiro, hacer algo nosotros mismos para nosotros mismos.
Lo que hizo este señor británico es establecer planes de pensiones para cada uno de sus sobrinos y sobrinas donde invirtió £100 en cada plan con el objetivo de concienciarles a tomar estos temas en serio, incluso a su corta edad.
No voy a hablar del beneficio de establecer una cuenta bancaria en nombre de cada niño para que, cuando alguien pregunte qué regalo debería dar al niño, se le pase el número de cuenta para que ingrese lo que tenía pensado gastar. Aunque a la larga sería mucho mejor para el niño, los adultos necesitan la gratificación inmediata de ver al niño sonreir con su nuevo regalo, aunque sea por poco tiempo.
Si voy a hablar de la buena idea que es que cada uno de nosotros siga el mismo camino que este señor y establecer nuestro propio plan de pensiones y lo antes posible. Nunca es uno demasiado joven para empezar y no hay que dejarlo a nuestros padres o a nuestros tíos para que lo hagan por nosotros.
Un ejemplo. Si siguiéramos el camino de este señor y abriéramos una cuenta de retiro e invertiéramos sólo 100 cada año mes, sin tocarlo, con la rentabilidad y los gastos que menciona, la acumulación a los largo de 40 años sumaría casi medio millón de euros. Y eso con el ahorro de sólo €100 al año mes.
Si ahorráramos200 al año, llegaríamos a casi un millón de euros y, si añadimos los beneficios fiscales de los planes de pensión y, además, si familiares que nos quieren dar algo ingresaran en la cuenta, terminaríamos con una cifra aún más alta.
Estableciendo un plan de pensiones y depositando muy poco de forma regular y automática acumula cantidades que, en el momento del retiro, impactaría mucho en nuestra vida
Nunca se es demasiado joven para empezar…ni demasiado tarde.